Tecno-mazorca (un grito corrosivo)
I
Se levanta Tenochtitlan entre
los afables dedos de los ciborgs
nuestra águila reposa en circuitos engullendo bytes
y el óxido envuelve los muros.
Ahí vamos impugnado las legislaciones tecnócratas,
nuestras botas aun rememoran las luchas
y las revoluciones siempre rojas.
¿A dónde nos ha trasladado tanta pugna?
— Hambre, hambre—
sigue siendo el conflicto
y las discrepancias ahora son ocultas
tras las máscaras de oxígeno.
II
No miramos al cielo
aun cuando nuestro aliento arde
de conjurar un fenómeno metafísico.
No nos arrodillamos ante las promesas
del dogmatismo
y el sol es un dicho
un vago recuerdo del calor del universo
y el cielo, una nube de ácido.
III
Y se elevan murallas de acero:
la frontera del hambre y el maíz.
Los imperecederos ciborgs nos miran
con desdén desde estrados electrónicos.
IV
Marchamos con epidermis mecánica
marchamos con el machete electrificado.
Suenan nuestras voces cimbrando las
luces artificiales de la noche
y bajo la lluvia que corroe las huellas
nuevamente destronaremos
o seremos el ultimo
vestigio de los hijos del
centro de la luna.

Ha participado en la antología de cuento hidalguense, Editorial Vozabizal y en la antología de poesía: Voces minerales Editorial Vozabizal. También ha publicado en algunas revistas digitales.
Estas bien de la cabeza?